A la hora de aplicar líquido puedes trabajar en distintas condiciones, a rangos de presión diferentes, sobre barras de gran cobertura, y lanzas de herbicida individuales, pero también en equipos #atomizadores a gran escala sobre árboles frutales; de cualquiera de las formas, cada una cuenta con la boquilla que optimiza la aplicación. Ahora bien, el aspecto espumoso depende del diseño final de la gota, de su tamaño, y de la cantidad de aire que aloje su mezcla, lo cuál se genera gracias al efecto venturi y a la presión de trabajo.
¿Por qué utilizamos boquillas anti-deriva?
Sacamos en claro los siguientes puntos:
La boquilla antideriva es una punta que aplica líquido con características propias y diferenciadoras de protección del medio y ahorro de euros
El concepto de “espuma” se aplica a gotas mezcladas con aire.
No todas las boquillas antideriva son de espuma, depende de la proporción de aire que contenga cada gota
Técnicamente la boquilla ofrece mayor control de la deriva de líquidos
Hay distintos caudales fácilmente adaptables al volumen de litros por hectárea que pretendemos aplicar en nuestros campos
¿Quedó algo más clara la diferencia entre boquillas anti-deriva y las de espuma?
Moisés Zamora Bayo
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